Muchos están disfrutando de unos merecidos días de vacaciones y otros ya están contando las horas que les faltan para aparcar las ocupaciones laborales. Es un buen momento para viajar, desconectar y poner tierra de por medio. Es una oportunidad para conocer nuevas culturas y los sabores de gastronomías distintas a la nuestra. Pero no todo el mundo puede o quiere viajar. Es una opción tan válida como otra quedarse en casa y visitar el entorno. Muchas veces ocurre que no conocemos nuestra ciudad y sus alrededores. «Total, siempre lo tenemos a mano» pensamos y siempre vamos posponiendo el momento de hacerlo. A mi incluso me ha llegado a pasar que vienen amigos de otras provincias a mi casa y visitan lugares en los que yo ni siquiera he estado.
Estamos en un mundo globalizado en todos los sentidos. Aunque no viajes no tienes que renunciar de los placeres de otros sabores. Puedes degustar platos muy distintos a los tuyos y que provienen de culturas muy lejanas, tanto en kilómetros como en la forma de ver la vida. En muchas ciudades españolas encuentras facilmente un restaurante japones, peruano, mexicano, chino, coreano, italiano,… hay para todos los gustos, de diferentes precios y de varias calidades. Algunos establecimientos fusionan gastronomía foránea y local, consiguiendo un resultado muy interesante.
Para probar nuevos platos no solo está la opción de acudir al restaurante. También tienes a tu disposición supermercados y tiendas especializadas que comercializan alimentos de todo el mundo. Con ellos, y la ayuda de algún libro o de algún blog, tienes la oportunidad de experimentar en la cocina con sabores de todo los lugares.
Algunas personas alegan que solo se disfruta de la comida de tal o cual país viajando al mismo. Es verdad que determinados productos frescos solo se pueden consumir allí. También es cierto que el restaurante humilde y muy auténtico solo lo encuentras allí. No es menos cierto que los restaurantes de gastronomía extranjera en España pueden estar algo influenciados… pero estas vacaciones, aunque no viajemos, no dejemos de disfrutar de otros sabores del mundo.