Me encanta el hogar, las casas entrañables y cálidas (sean cómo sean y del tamaño que sean) en las que sus habitantes e invitados sienten bienestar, armonía y refugio frente al mundo exterior; me encanta que estén cuidadas -no hablo de decoradas- al gusto de sus dueños; y me encanta el poder que emana de hogares equilibrados (eso lo expliqué en «Inteligencia doméstica«).
Y como todo empieza la puerta, me encantan las casas que te dan la bienvenida desde fuera. Antes solo lo veía en películas americanas y en las revistas pero cada vez hay más personas en España que embellecen su entrada con este elemento decorativo, y no solo en navidad.
Ya os enseñe nuestra corona de otoño con espigas de trigo, canela y naranja seca y ahora os muestro la del invierno.
Esta corona de navidad con palomitas de maíz la ha diseñado y creado Esther Rubio, apasionada y experta en manualidads creativas, y este es el tutorial para hacerla en casa:
Materiales
Podéis encontrar los materiales en ferreterías o tiendas de manualidades.
- Corona de porex. Existen de diferentes tamaño
- Pistola de silicona
- Barras de silicona
- Cinta de raso para colgar la corona
- Pintura para pintar la corona de porex
- Palomitas de maíz ya saltadas
- Spray dorado
Elaboración:
Nota: dado que las palomitas son blancas, no es necesario pintar la corona de porex.
Paso 1: Con ayuda de la pistola de silicona vamos forrando con las palomitas la mitad delantera de la corona de porex. Superponiendo las mismas para crear más efecto de volumen. Indicar que no es necesario forrar la parte de atrás, dado que además de que estará apoyada sobre la pared o puerta, evitaremos que se deterioren las palomitas, dado que son algo delicadas.
Paso 2: pintamos con spray dorado toda la corona. Dejamos secar.
Paso 3: Hacemos la composición de los objetos de detalles navideños que podemos reciclar de años anteriores, como pueden ser bolitas de navidad, muñecos… Los vamos pegando con silicona caliente.
Paso 4: COLOCARLA EN LA PUERTA. Se trata de colocarla cuidando al máximo la puerta y hay varias opciones:
- quitar la mirilla. Eso es lo que hemos hecho con la corona de la foto. Clavando una escarpia por detrás de la corona, en el porex, y eso se sujeta en el orificio de la mirilla y lo atamos con una cuerda/lazo por la parte interior de la puerta
- pegando un colgador de pegatina resistente -del color de la puerta- y de ahí colgamos la corona con un lazo bonito. Cuando quitemos la corona y la pegatina, se limpia bien la puerta con alcohol
- pegando 2 colgadores de pegatina pequeños en la puerta y colgando en ellos 2 escarpias que habremos clavado a ambos lados de la corona, en la parte trasera