mermelada fresas y frambuesas

Imposible resistirse a hacer mermelada con las primeras fresas y frambuesas de nuestra huerta, y como queremos sacar todo el partido a la fruta y prescindir del azúcar blanco (el principal ingrediente de muchas mermeladas comerciales) vamos a elaborar mermelada sin azúcar como explicamos en el artículo «Cómo hacer mermeladas más sanas«.

La experta en alimentación energética Montse Bradfod recomienda usar fruta neutra (como manzana y pera), fruta seca (como orejones o pasas, no tratadas con sulfatos preferentemente) y la fruta fresca elegida, en este caso fresas y frambuesas, junto con una cucharadita de sal marina que ayudará a traer el dulzor de la fruta a la superficie.

La proporción sería: 2/4 de fruta neutra que aporta el volumen, 1/4 de fruta seca que da el dulzor natural y 1/4 de fruta fresca para el color y el sabor principal. También sugiere añadir al final copos de agar-agar previamente remojados para conseguir la textura gelatinosa (se cuecen 7′ para que se disuelvan bien) y una cucharada de kuzu disuelto en un poco de agua para la consistencia y cremosidad.

Pero para esta receta de mermelada de fresas y frambuesas sin azúcar he simplificado mucho y adaptado los ingredientes a lo que tenía por casa: los frutos rojos, 2 manzanas e higos secos y no he necesitado esos espesantes naturales porque el higo ya le ha aportado la textura gordita adecuada.

Estos son los pasos:

Ingredientes

  • 800 gr entre fresas y frambuesas, 725 gr una vez limpias de rabitos
  • 2 manzanas
  • 250 gr de higos secos
  • unos 200 ml de agua
  • 1 cucharadita de sal marina
  • opcional para endulzar más al gusto: unas gotas de stevia, unas cucharadas de melaza de cereales, ágave o azúcar de caña

Elaboración

mermelada fresas pasos

1. Lavamos y limpiamos la fruta fresca, pelamos las manzanas, quitamos los rabitos a los higo secos. Lo troceamos todo

2. Ponemos toda la fruta en una cazuela con el agua y dejamos cocer a fuego lento 1 hora o lo necesario para que se evapore el agua y todo quede blandito. Hemos usado una cazuela de barro porque es de las más grandes que tenemos

3. Batimos hasta conseguir la textura deseada. Es el momento de decidir si echamos 2 cucharadas de agar-agar y/o kuzu o no. Con los higos no es necesario, si lo hubese sido con orejones o frutas más líquidas como ciruelas

4. PROBAMOS EL SABOR. Pues no me ha resultado suficientemente dulce a mi gusto y le he añadido al final 3 cucharadas de melaza de arroz.

¿Cambia el higo el sabor de las fresas y frambuesas? En esa proporción poco, pero sí le aporta la esponjosidad y sus semillitas. Es cierto que no sabe igual que las mermeladas que llevan solo azúcar y fresa pero ¿acaso no altera tanta azúcar el sabor de la fresa natural?

5. CONSERVA DE MERMELADA. Como han salido 3 botecitos de mermelada, además de un cuenco que comeremos en los próximos días, hemos decidido embotarlos, como hacemos con el tomate frito, para tenerlo disponible durante todo el año

  • Necesitamos botes y tapas limpias. Si son tapas ya usadas las esterilizamos hirviéndolas unos 20′, si son nuevas, es suficiente con limpiarlas y secarlas bien.
  • Con un cazo pasamos la mermelada de la cazuela a botes hasta arriba (en función de la textura, no podremos usar embudo, el cazo es mejor opción). Cerramos bien.
  • Los hervimos en una cazuela grande cubierta de agua durante 20′.

6. Disfrutamos de nuestra mermelada más sana

OTRAS RECETAS: Mermelada de ciruelas (con orejones)