
Mis hermanos suspiran por un plato de patatas con salsa brava de un bar de una localidad cercana y solemos ir allí para tomar un aperitivo de vez en cuando. Aunque parezca una receta simple, muchos no consiguen prepararla bien porque las patatas están aceitosas o demasiado hervidas y no crujientes, y porque la salsa brava no está a la altura (demasiado picante, o líquida, o tomate de mala calidad).
Pero esta receta de salsa brava la he aprendido de mi madre, siempre gusta mucho y es un buen acompañante de patatas al horno (las prefiero a fritas), arroz u otro cereal hervido, huevos, proteínas o verduras al vapor o a la brasa.
Estos son los pasos:
Ingredientes
- Un bote de tomate frito casero de buena calidad. Uso mi propia conserva
- 2 guindillas cayenas
- 2-3 cucharadas de mayonesa, o al gusto
Elaboración

1. Calentamos en una sartén el tomate con las guindillas unos minutos. No las troceo para que nadie se las coma ya que pican mucho, es suficiente con que den su saborcillo especial al tomate
2. Retiramos las guindillas. Además de picar mucho, son rojas y puede haber confusiones con la salsa
3. Apagamos el fuego y añadimos unas cucharadas de mayonesa de forma que el color de la salsa se aclara y quedan grumitos. Removemos bien
4. Aliñamos con esta salsa brava cualquier comida. Con esta tortilla de patatas sin huevo está deliciosa…
otra receta
http://food-and-cook.blogs.elle.es/
y otra: http://wholekitchen.es/receta-de-patatas-bravas/
otra con pimentón
http://www.gastronomiaycia.com/2013/09/08/hoy-cocinas-tu-patatas-bravas-a-mi-manera/?