pesto rojo

Es cierto que se esta receta se llama «pesto» como la famosa salsa italiana de color verde intenso y que también lleva albahaca, piñones y parmesano, pero este pesto rojo con tomates secos tiene un sabor completamente diferente, otros usos más allá de acompañar pasta y tal vez merecería un nombre propio.

Los que la han probado sobre unas tostadas o en canapés con queso se ha sorprendido de lo rica que está y han repetido.

Y así de fácil es hacer el pesto rojo con tomates secos:

INGREDIENTES

  • Unos 6 tomates secos. Los secamos nosotros al sol al final del verano con estas sencillas instrucciones
  • 1 diente de ajo pelado
  • 1 cucharada de piñones. Mejor los tostamos un poco en una sartén sin aceite
  • 50 gr de queso parmesano rallado
  • unas 10 hojas de albahaca fresca. La albahaca seca no aporta el mismo sabor ni color en los pestos
  • 100-200 ml de aceite de oliva. Iremos viendo la cantidad que necesitamos al batir los ingredientes

ELABORACIÓN

1. Hidratamos los tomates sumergiéndolos en un cuenco con agua durante al menos 15′. Tiramos el agua

2. Ponemos en el vaso de la batidora los tomates troceados, piñones, albahaca, ajo, queso y aceite y vamos batiendo hasta conseguir una pasta de la textura deseada. Mejor gordita y con algunos grumos si queremos el pesto rojo para untar en pan, y más líquida y homogénea si es para salsa de pasta

3. USOS

  • como paté vegetal. Al igual que el hummus (paté de garbanzos), el mutabal (paté de berenjenas), el tapenade (paté de aceitunas) y tantos otros patés caseros podemos tomarlo con crudites de verduras o panecillos
  • para la pasta podemos añadir más agua, en vez de aceite, para que quede menos compacto
  • para canapés con queso u otros ingredientes
  • para acompañar patatas o verduras asadas
  • para alegrar un arroz u otro cereal
  • como aliño de ensaladas diluyéndolo con buen aceite (sugerencia de Nefer)

4. VARIACIONES

Podemos probar otras combinaciones con otros frutos secos como avellanas o nueces, otras hierbas como orégano u hojas de rúcula, otro queso como mozarella, … Cambiará ligeramente el sabor pero siempre predominará el de los tomates secos.